domingo, 6 de diciembre de 2009

CAPITULO 12-14

Después que Charlotte abrió la puerta del laboratorio y salió al pasillo de la escuela todos se le quedaban viendo por que ni ella misma se lo creía que estaba viva, a ella todos se le quedaban viendo pero ella no le importaba, caminaba por los pasillos y saludaba a toda la gente aunque no la conociera Charlotte.

El control de Charlotte y el cuerpo de Scarlet también empezaron a agarro un aspecto y una forma de moverse diferente. A pesar de todo Scarlet y Charlotte no estaban de todo convencidas de su plan, al final y al cabo el plan de Scarlet era el plan B, para ellas no era el cuerpo, la ropa, el pelo y todos los accesorios que utilizan las mujeres que todos los chicos hasta el más popular la encontraban agradable sino su amabilidad, Charlotte siguió caminando hasta las chanchas de futbol.

Scarlet se divirtió, ella empezó a caminar y caminar sin rumbo hasta que el profesor de Literatura les hablo pero el profesor solamente les gustaba humillar a los alumnos, pero Scarlet no se dejo y lo que escribió el profe en el pizarrón Scarlet lo cambio y todos comenzaron a reírse y el profesor se quedo humillado. Era un día perfecto para el entrenamiento de futbol, había de todo Scarlet andaba buscando un ángulo para que el sol le diera pero parecía que nunca le había tocado el sol porque tenía la piel de porcelana.

Scarlet estaba muy contenta fue a la sala de maestro y se sentó a platicar con ellos, cuando vieron a Charlotte que estaba haciendo piruetas todos sus compañeros se le quedaron viendo y dijeron los profesores que era gótico lo que andaba haciendo y gritando que iban a ganar. Charlotte era una animadora y le dijo a Damen que muchos años de ensayo y Scarlet puso la coreografía y dijo Scarlet que esto sea una pesadilla, a Charlotte le invitaron a una pijamada y uno de sus compañeros dijo muera el fantasma del instituto, Charlotte ya no podía soportar más su agonía y finalmente se decidió a entrar y echarle una mano para la puerta que se dirigió al fondo del aula, así su mesa de Damen.

Damen entro a un segundo baño que separaba los dormitorios de los dos hermanos y tiro de la cisterna se hizo una cortada de su nido que le acompañaba mientras abría la puerta y bajo a toda prisa las escaleras.

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